Los cuadros de mi habitación no son más que pensamientos ajenos… sentimientos reprimidos de un no sé quien pero que están aquí y ante ellos mi presencia, en silencio, los observa…
Esta madrugada descubrí que hay algo más preciado que el silencio de la noche, la oscuridad de mi habitación y los misteriosos cuadros en mi pared.
Descubrí que el tiempo y el espacio se convierten en nada cuando frente a ti se postran sentimientos, pensamientos e ideas de un ser reprimido, un ser que nadie entiende (ni siquiera él) un ser silencioso que vaga de un lado a otro sin que nadie se percate de su presencia, un ser que esta noche yo he podido comprender…
Se trata de un hombre de unos 30 y algo (relativamente joven), cuerpo normal, estatura y peso promedio, ojos hundidos y nariz pronunciada, cabello oscuro y ojos color de la miel… no es guapo ni feo… más bien de belleza extraña.
Clava su mirada en un cuadro. Observa cada detalle y creo poder ver y sentir como las lagrimas se le corren por las mejillas al verse llorando en su pintura: el hombre, ese que es reprimido, ese que deambula de día y de noche, llora al verse a sí mismo… pero no esta solo, ahora yo lo veo a él… y veo a su otro él quien a su vez también ve un cuadro en una pared… todos rodeados por un circulo vicioso.
Claro, que yo sepa, no soy yo la de los cuadros pero podría serlo si fuese tan reprimida como ellos…
…pensado esto y en ese momento, como efecto dómino, uno a uno los hombres vuelven sus miradas a mi… me observan con curiosidad, otros con enojo y otros con tristeza…
El primero de ellos extiende su mano y por una extraña razón que no logro comprender, leí en su mirada: de este lado todo se ve diferente.
Toque su mano fría como trozo de hielo pero suave como piel de bebe.
… Junto a él me encuentro observando un cuadro de una joven que clava su mirada en el cuadro de un hombre reprimido: esa soy yo.
Un susurro en mi oído me dice que todos observamos las vidas de las personas a diario pero rara vez observamos la nuestra desde la perspectiva del otro…
…
El silencio de esta oscuridad no es más que los susurros de la noche… fría y distante, lista para atacar…lista para hacerte soñar, ver la verdad y reflexionar…